Desde que el 15 de Junio de 1977 acabada la dictadura los españoles fuimos a las urnas para elegir Cortes Constituyentes , si hay algo característico de la sociedad en treinta y seis años son los grupos de presión , ya sean estos sindicales , de patronales , kulturetas o de cualquier otro pelaje y condición, que reclamando atención sobre lo imprescindible que resultan para la supervivencia de la Nación exigen tajada del dinero de los contribuyentes.
Para agravar la situación , durante estos años los rasgos generales del gobernante de turno han sido su permeabilidad, cuando no su cobardía, lo que ha aumentado el gasto público de una forma que inexorablemente ha llevado al pozo actual , con la inestimable colaboración de la suicida estructura del Estado , en donde conviven , malviven , Gobierno de la Nación , Gobiernos autonómicos, Diputaciones Provinciales , Cabildos , Mancomunidades , Ayuntamientos , Juntas Vecinales y Pedanías. Todos gastando , todos endeudandose , situando el déficit público en la suicida frontera del 10 % del PIB.
Por si esto fuera poco , que no lo es , la deuda privada de empresas y familias ha resultado totalmente dañina para la inversión empresarial y el consumo. Habrán aprendido las empresas que el dinero desatinadamente barato no justifica sumarse a proyectos descabellados …? que ponerse a fabricar estufas en el Sahara es una estupidez. Habrán aprendido las familias que endeudarse es adquirir unos compromisos de pago que hay que cumplir …?
Todo así , así de simple , así de fácil , así de suicida, como si no costase, olvidando que nada es grátis que todo hay que pagarlo. Con interéses y contrapartidas.
Habremos aprendido que las tonterías del líquido pensamiento , del buenísmo de las inadecuadamente llamadas energias limpias , caras , en donde hasta el año 2011 cada megavatio / hora producido por energía eólica recibió una subvención de 81 € mientras que el precio en el mercado mayorista era 42 € , lo que ha supuesto 6.200 millones de € en subvenciones y claro, esta juerga hay que pagarla.
Habremos aprendido que mantener principios ignorantes no conduce a nada más que al despeñadero …? entenderemos de una vez por todas que no toda inversión pública es adecuada …? que hay inversiones de hoy que son el déficit del mañana. Sabemos que el gasto medio de mantenimiento de un kilometro de autovía es de 65.000 € anuales …?
Acaso podemos obviar que la alta velocidad tiene un coste de mantenimiento de 150.000 € por kilómetro y años…. Ejemplos estos, no los únicos ni los más escándalosos, suponen la bomba de relojería que se ha venido montando en España y cuya pirotécnia alcanzó la traca final con la melonada conceptual del Plan E .
La era del endeudamiento tiene que estar finiquitada , no se puede continuar con eufemismos del gasto como activador de una demanda no real y que lo único que genera es una corriente de gasto ad infinitun.
Aunque la verdad , visto como ladran algunos reclamando que se continue por la suicida pendiente del gasto público parece que no todos han aprendido , o tal vez si , porque su existencia depende de ello aunque nos conduzcan al suicidio.