Libertad : » Estado o condición del que es libre, del que no está sujeto a un poder extraño o a una autoridad arbitraria».
Les parece excesivo…? no lo es. Cuando una persona inicia su actividad profesional, en su primera nómina además de las retenciones para el IRPF y otros impuestos aparecen dos conceptos que le dejarán encadenado para el resto de su vida : El sistema público de pensiones y la Seguridad Social.
Toda nuestra vida, durante todos los meses de trabajo el Estado nos arrebatará todo el dinero que quiera para sin poder optar, sin poder decidir, sin alternativa alguna nos veamos sometidos a unos sistemas que decidirán sobre nuestro bienestar y nuestras pensiones.
Por supuesto que esto no es lo único, las personas se ven obligadas a trabajar muchos días, desgraciadamente demasiados, para el Estado.
Si se ganan poco más de 20.000 € una persona dedicará 180 días de su trabajo al año para librarse de la condena fiscal.
Se trabajan 100 días para cubrir la requisa de las cotizaciones a la Seguridad Social, 38 días para el IRPF, el IVA nos supone otros 25 días de trabajo, 12 días de esta moderna esclavitud para hacer frente a los llamados impuestos especiales y por si esto o no fuera suficiente una semanita más de trabajo para otro tipo de impuestos con los que este Estado Benefactor nos obsequia. Por supuesto el Estado no se conforma únicamente con esto, que además lo realiza de una forma tan segmentada que el expolio pasa más desapercibido, a las empresas también les toca lo suyo. La empresa que contrate como decía anteriormente por poco más de 20.000 € a una persona al final tendrá que pagar más de 30.000 €, eso si, como lo llaman cotizaciones sociales la cosa queda muy cool, porque en este País nuestro a cuenta de cuestiones como social o solidaridad los sablazos parecen menos sablazos.
No se crean que hemos acabado, no es lo único que pagaremos, ni mucho menos ¡¡¡ si disponemos de una vivienda, por ejemplo en Santander, pagaremos de IBI una media de 387 € , para que siguiendo con los consumos elementales de cada hogar nos encontremos con la luz soportando gravámenes del entorno del 50 %, que en el caso del gas soporta tanto el 21 % de IVA como el impuesto de hidrocarburos, a los que añadiremos los impuestos sobre saneamiento, basuras y también los llamados medioambientales.
Aquí la cosa no se acaba, ni mucho menos, si tenemos un automóvil pagaremos el 54 % de impuestos de cada litro de carburante cargado al depósito, el ayuntamiento de turno requisará su parte del botín automovilístico con el impuesto de circulación, los aparcamientos y la OLA, mientras que ese monstruoso negocio que son las ITV nos esperan en el momento adecuado de meternos el palo.
Saben una cosa …? que la lista es interminable, los impuestos que pagamos con la ropa que vestimos, los alimentos que tomamos, el teatro que podamos ver, las cañas del verano, los cafés del invierno y las comidas con los amigos.
No era una afirmación gratuita el titular de este artículo, es una desgraciada realidad, no somos libres, el Estado se apodera del producto de nuestro trabajo menguando nuestra libertad.
Que quieren que les diga… compremos libros, que únicamente están gravados con un IVA del 3 %.