Las quejas y lamentaciones se repiten cada día, por unas u otras causas
Hoy toca protestar por una medida de la Consejería de Educación, Juventud y Deporte de la Comunidad Autónoma de Madrid relacionada con el complemento retributivo de tutoría de los profesores de secundaria de los centros de titularidad pública (entre 10.000 y 15.000 afectados, según las estimaciones de las distintas centrales sindicales). En concreto, tal y como recogen distintos medios de comunicación escrita, las quejas proceden de los responsables del área de educación de los sindicatos UGT, ANPE y CCOO en esa región. En este sentido, han manifestado su total rechazo a la decisión de la Administración de reducir la cuantía mensual del complemento de tutoría de esos profesionales, en un 50%; es decir rebajar los 75 euros que perciben actualmente a 37,5 euros.
La resolución de las autoridades académicas de la Comunidad Autónoma de Madrid fue ampliamente discutida en la mesa sectorial de educación celebrada el 11 de enero. Durante el transcurso de la citada reunión los agentes sociales manifestaron su radical discrepancia a los mandatarios de la Consejería.
El representante de UGT echó mano a la manida manifestación de que la medida obedece a fines políticos. Su argumentación la basó en una contundente afirmación en el sentido de que la Consejería nunca ha visto con buenos ojos este complemento retributivo. Esta apreciación no por asombrosa deja de ser respetable, aunque no la comparto en absoluto. ANPE afirma, por otro lado, que esta decisión representa “un duro golpe al sector” cuyo ajuste les encuentra desprevenidos. My goodnes; What a shock!
CCOO preconiza que la tutoría es un “hecho diferencial de la profesión, un elemento de calidad del sistema”. Además, la representación sindical de esta organización en materia de educación recuerda que el reconocimiento de este complemento retributivo fue uno de los logros conseguidos en 2011, en contrapartida a la ampliación del horario máximo lectivo de 18 a 20 horas. Y continúa afirmando,… gracias a la presión sindical ejercida en aquel momento, en contra del intento de supresión de las horas de tutoría por la Consejería. I´m sorry; I just can´t accept it!
A mayor abundamiento, Eduardo Sabina, responsable de Educación de UGT Madrid; Isabel Galvín, su homónima de CC.OO y Francisco Melcón, de ANPE piden además a la Consejería de Educación, Juventud y Deporte que los docentes del resto de enseñanzas y etapas educativas también cobren este complemento retributivo por su función tutorial. See it to believe it! ¡Si no lo veo (leo) no lo creo!
Fuentes autorizadas de la Consejería hicieron pública su posición en una nota de prensa en la que pusieron de manifiesto que “a pesar de la crisis” la Comunidad Autónoma de Madrid mantiene otros complementos destinados profesores que desempeñan funciones en órganos unipersonales de dirección y participación. Ese es el caso de la retribución por el desempeño del cargo de director, jefe de estudios, secretario, jefe de departamento, profesores de bilingüismo, coordinadores de Tecnologías de Información y Comunicación (TIC), los responsables de campeonatos escolares, encargados de biblioteca.
Si digo bien, ¡mantienen un complemento económico para los responsables de biblioteca!… ¡y los de campeonatos escolares! Llegado a este punto merece la pena resaltar que los funcionarios públicos docentes de educación secundaria tienen una jornada laboral de 37,5 horas, de las cuales 20 serán lectivas –desde setiembre de 2012- (hasta entonces impartían un máximo de 18 y el resto, es decir, 19,5 horas, complementarias). Asimismo, disfrutan de UN MES de vacaciones en verano.
No entro a valorar el deterioro del poder adquisitivo de los funcionarios y de los empleados públicos en los últimos años, como consecuencia de los ajustes llevados a efecto por las diferentes administraciones educativas, también por la comunidad autónoma de Madrid. Por cierto, ajustes que se aplicaron “por simpatía” a los profesionales docentes de los centros concertados. Lo que me resulta sorprendente es la reacción virulenta de los sindicatos del sector de la educación pública madrileña por defender posiciones que comparativamente hablando con otras autonomías o con el sector privado concertado no se sostienen.
La decisión de reducir el salario de cualquier trabajador es siempre traumática; también cuando se reduce el de los profesores de secundaria madrileños. Ahora bien, afirmar que la tutoría es un “hecho diferencial de la profesión, un elemento de calidad del sistema”, raya con el insulto a la inteligencia de los ciudadanos. Busquen otros argumentos, por favor.
Sí, pero no. Si a la defensa de los derechos de cualquier trabajador, incluso en tiempos de crisis; pero no a cualquier precio, con argumentos inaceptables. Yo, al menos, así me lo parece. La tutoría y la orientación escolar y profesional forman parte de la esencia misma de la función docente. No se puede pretender que a uno le paguen dos veces por el mismo trabajo dentro de la misma jornada laboral.
¿Qué funciones desempeñan los profesores de secundaria madrileños en las casi CUATRO HORAS diarias de actividades complementarias (19,5 horas semanales) que conforman su jornada laboral? ¿Debe entenderse la atención a la biblioteca un desempeño extraordinario, dentro de las obligaciones profesionales, por el que el profesorado deba obtener un complemento retributivo adicional? ¿Creen ustedes que los ciudadanos de a pie entienden que exista una retribución adicional a los profesionales docentes de secundaria de la Comunidad de Madrid por ocuparse de los campeonatos escolares?
¿No son suficientes complementos, aparte de la correspondiente reducción de horas lectivas, (20 semanales) aquellos que aplican al desempeño del cargo de director, jefe de estudios, secretario, jefe de departamento, profesores de bilingüismo, coordinadores de Tecnologías de Información y Comunicación (TIC),…?
Sin ánimo de parecer gracioso –la “cosa” no está para chistes- y en mi condición de profesional del sector de la enseñanza privada concertada, la reacción de los responsables del área de educación de los sindicatos UGT, ANPE y CCOO madrileños me ha asombrado. Su corporativismo exacerbado, en unos momentos de crisis en que todos los ciudadanos –también los profesores de secundaria del sector público de la Comunidad de Madrid- debemos arrimar el ascua a la sardina, resulta incompatible con el esfuerzo colectivo de solidaridad y de responsabilidad que la sociedad demanda.
No es mi intención convencer a los sindicalistas madrileños. Ahora bien, si dejo constancia de mi perplejidad por su actuación. Si mis reflexiones les resultaran incomprensibles les invito a realizar un análisis comparativo sobre el salario, la jornada y los complementos retributivos de los profesionales docentes de secundaria de toda red de centros sostenida con fondos públicos.
En fin, y en todo caso, la Consejería de Educación, Juventud y Deporte de la Comunidad Autónoma de Madrid ha anunciado que la reducción de los 37,5 euros equivalentes a al 50% de la cuantía actual del complemento de tutoría será efectiva en cuanto se publique la orden que lo regula, previsiblemente a lo largo de este mes de enero.
«No ensucies la fuente donde has apagado tu sed», decía William Shakespeare. Los profesionales docentes de secundaria de los centros públicos de la comunidad de Madrid, como todos los empleados públicos, gozan de un estatus laboral y social envidiable. Si no me creen a mí, pregunten a los ciudadanos de a pie –trabajadores por cuenta ajena, desempleados, profesionales autónomos,..- lo que piensan sobre ello. La frase que he elegido para concluir este post no pretende ser soez, más bien intento con ella hacer una llamada a la reflexión sobre las reacciones sociales de un colectivo que no tiene entre sus preocupaciones vitales perder su puesto de trabajo. Además, sirvan estas líneas para recordar que el Gobierno ha de gestionar los recursos de todos a favor del bien común. Al fin y al cabo, parafraseando de nuevo al dramaturgo universal inglés «Fuertes razones, hacen fuertes acciones.»