Con este título se estrenó en 1968 una película protagonizada por Martínez Soria, era el modelo de propaganda buenista que toleraba la dictadura, situada en un marco costumbrista mostraba los principios de una industria internacional que en España inicia su lanzamiento desde el Ministerio de Información y Turismo con aquellas campañas de «España es diferente».
Básicamente son los primeros pasos de un turismo de masas que en 2019 vio llegar a España 83,7 millones de personas procedentes del exterior y que interiormente ha entrado definitivamente a formar parte de los hábitos de comportamiento de los españoles, tal como acreditan los datos de la Encuesta Continua de Presupuestos Familiares realizada por el Instituto Nacional de Estadística.
A lo largo de todos estos años el turismo en España se ha situado como una actividad de enorme relevancia económica y social cuya participación en el PIB está en el entorno del 11% y que previo a la crisis del CORONAVIRUS trabajan 2,6 millones de personas.
Estamos por lo tanto hablando de un sector cuya importancia cuantitativa es muy superior a la Agricultura, la Ganadería y la Pesca que ocupando a un millón de personas supone un 2,5 % del PIB, o también podemos señalar al sector de la Construcción que alcanzando el 6 % de PIB tiene en la actividad unos 950.000 empleos. Estamos por lo tanto ante un sector de actividad de importancia capital que solo en 2019 trajo a España millones de visitantes extranjeros que gastaron más de 90.000 millones de euros.
Esto así, directamente, que la importancia e influencia en otros sectores, profesionales o empresas es notable, comenzando por la Educación en donde la Universidad expide los Grados de Turismo, los centros oficiales los títulos superiores de FP del sector, además de las habilitaciones profesionales de Guías Turísticos o las Escuelas de Idiomas imprescindibles para una adecuada cualificación de los profesionales que operan en la actividad.
Que el turismo no es endogámico es algo más que evidente, pues la profesiones que se nuclean en mayor o menor medida junto al sector son numerosas. Así la relación con las Agencias de Publicidad y RR.PP que diseñan las campañas turísticas y que también requieren de las empresas de artes gráficas para la elaboración de folletos, cartelería, guías etc … actividades estas que también se relacionan con las organizaciones de congresos y eventos, que a su vez necesitan azafatas, guías , traductores o servicios de seguridad, formando un amplio entramado de funciones con el turismo que no finaliza con estas, ya que sigue demandando desde socorristas a corredores de seguros.
Vista esta relación, en ningún caso exhaustiva, el mundo sectorial / empresarial acompasado con la actividad turística demanda de manera muy principal transporte, ya sea este aéreo, ferroviario, por carretera o marítimo, capaces de transportar a millones de personas no únicamente desde sus puntos de origen sino también por el interior de la Nación.
Continuará …….